El Concejo Deliberante le dio luz verde a un polémico proyecto de supermercados enviado por el Ejecutivo.
Se trata de una iniciativa que fue avalada por la mayoría del legislativo, aunque con el rechazo de sectores de la oposición, que legaliza a los negocios que se establecieron de manera irregular, al no respetar las distancias de 600 metros entre un local y otro, además de reducir esa distancia a la mitad: 300 metros.
La idea generó un fuerte rechazo de la Cámara de Comercio de Pilar (SCIPA), y de empresarios del sector, como Roberto Videle, titular de la cadena La Economía.
Desde la SCIPA se mostraron “sorprendidos” por el proyecto, y se reunieron de urgencia, en la noche del miércoles.
De allí surgió un comunicado en donde reclamaban a los ediles que frenen el tratamiento de la iniciativa hasta tanto se analiza con más profundidad.
La titular de la entidad, Edit Domínguez, expuso a Pilar de Todos que la proliferación de locales, sobre todo en un contexto de crisis, perjudicará al comercio ya instalado. Y, aunque aún en voz baja, apuntan a la radicación de supermercados chinos.
Videle, en tanto, también le pidió a los concejales “sensibilidad” y que frenen la iniciativa, que según señaló ponía en riesgo cientos de fuentes de trabajo.
De hecho, Videle expuso que al cambiar las reglas de juego, se vería obligado a frenar inversiones en uno de sus locales, el de la calle Rivadavia, y de hecho no descartó tener que cerrarlo.
Sin embargo, en un trámite exprés, donde ninguno de los concejales que votó a favor hizo uso de la palabra, se apoyó la medida.
El que sí habló fue el opositor Federico Achával (su bancada Frente Pilarense se opuso, lo mismo que la de Silvio Rodríguez, Juan Pablo Roldán, Daniel Liberé y Nicolás Darget).
Achával expuso que el Ejecutivo debería escuchar a los comerciantes, y no “meter por ventana” un proyecto de ese envergadura, pero su pedido para que el texto sea devuelto a comisión fue denegado.
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